lunes, 28 de noviembre de 2011

LOS TICs EN LENGUAJE Y COMUNICACIÓN

Las anteriores publicaciones obligatoriamente debían iniciarnos en el tema de las Nuevas Tecnologías Comunicativas, en la información y por ello en la comunicación. Pero dejan a la deriva un tema no menos importante sin abordar, el lenguaje.

"El Lenguaje habla de los objetos de estudio de todas las disciplinas o de todas las ciencias, o se toma a sí mismo como objeto de estudio; no obstante, las maneras como el hombre se acerca a éste son siempre las mismas: lee, escucha, discute, escribe o investiga sobre las temáticas que pretende conocer"

Ministerio de Educación Nacional de Colombia (MEN), Estándares Curriculares para Lengua Castellana (Documento de Estudio), Bogotá, Julio de 2002.

El lenguaje debe dirigirse al desarrollo de las competencias comunicativas básicas teniendo en cuenta el concepto ya visto de comunicación. En estos tiempos de globalización se exige el desarrollo de habilidades de comprensión y comunicación que permitan al sujeto acercarse a cualquier área del conocimiento humano.

Entonces lo primero en revisar con respecto a la importancia del lenguaje en la comunicación es el papel de los docentes en la enseñanza, por ejemplo, la escritura podría encontrar en la tecnología un apoyo realmente importante. Varios estudios han sugerido que el uso de ordenadores tiene efectos positivos en la cantidad y calidad de los textos producidos por los estudiantes. Y que, tal y como lo examinamos en los temas anteriores, el proceso de escritura es más colaborativo, interactivo y social en clases que utilizan computadores, comparado con clases que utilizan la escritura manual. De esto se puede inferir que los docentes deben aprovechar que los estudiantes encuentren en la tecnología un espacio propicio para la comunicación en este caso escrita, y para sacar partido de estos ambientes tecnológicos pueden programar actividades que establezcan vínculos entre escribir en el “on line” y hacerlo en los ambientes académicos.

Las nuevas relaciones comunicativas en la sociedad unidas a los nuevos procesos de enseñanza y aprendizaje, nos llevan a confiarle a las nuevas tecnologías nuevos conceptos de organización, gestión y significados para el uso del lenguaje. Pero ante esto existen ciertos obstáculos que degeneran el proceso de organización que se aplican a las nuevas estrategias de enseñanza. Primero, no se tienen en cuenta las interrelaciones de los medios con las dimensiones y los aspectos de la enseñanza, también se olvida la importancia de la formación pedagógica para el uso de los medios y, por último, se olvida que en principio las nuevas tecnologías en la enseñanza se deben emplear para realzar los modelos de enseñanza existentes.

Un mensaje está mediado por la interacción que provoca, y que la única respuesta posible está en la elaboración de mensajes desde la educación, no solo de la utilización indiscriminada de mensajes ya existentes y aplicados a situaciones de enseñanza. Puede ser contradictoria esta “declaración” de principios, la realidad de la capacidad no crítica, sin opinión propia ni puntos de vista, del telespectador ante los mensajes de masas y, sobre todo, la clara consciencia de que el aprendizaje no puede ni debe ser exclusivamente verbal.

“Atención al frente tecnológico, tanto de hardware como de software, de las innovaciones en el aprendizaje, y de las técnicas de planificación y diseño de productos de enseñanza, y la presencia notable de las posibilidades, las limitaciones y las distorsiones susceptibles de ser presentadas a través de los leguajes verboicónicos. Estimo que el análisis estilístico y crítico que se pretende potenciar en la lengua escrita, que los comentarios de texto que se pretenden incrementar en la enseñanza, se verán correspondidos por una similar preocupación por la capacitación al alumno – y por tanto al profesor – en el análisis del lenguaje verboicónico, por la expresión plástica.”

MARTINEZ Sánchez, Francisco, PRENDES Espinosa, Ma. Paz (Coords.). Nuevas Tecnologías y Educación. PERSON PRENTICE HALL. Madrid, España, 2008.

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